Reflexiones sobre el artículo “Las competiciones no hacen la marcha nórdica”, de José Antonio Pérez González, de Cartagena (https://nordicartagena.blogspot.com/2019/03/las-competiciones-no-hacen-la-marcha.html#comment-form)
Hola, soy instructor de Nordic Walking N2 por la ENWA, practicante habitual y entrenador ocasional.
He leído con atención tu artículo y se me ocurren algunas reflexiones al respecto.
La primera de todas y creo que la más importante es que, cuando hablamos de Nordic Walking, creo que no se debe dogmatizar demasiado. Es cierto que en los últimos años se ha avanzado mucho, se han escrito artículos por expertos, por médicos, cada vez hay más practicantes en todo el mundo, pero todavía queda mucho camino por recorrer. Hay temas que todavía no conocemos bien, ni siquiera desde el punto de vista científico o médico. El camino se está haciendo ahora. Esto nos debe hacer cautelosos a la hora de afirmar o juzgar determinadas cuestiones alrededor del Nordic Walking.
Estoy de acuerdo en que la marcha nórdica es por encima de todo una actividad física saludable, si se practica adecuadamente y con una técnica determinada, por ejemplo, la técnica ALFA, que bien conozco y practico. Pero hay muchas técnicas y también pueden ser válidas y saludables. Los movimientos en el Nordic Walking tienen que ser por encima de todo funcionales: “no existe eso de “incorrecto”. Todo lo que funcione y no cause perjuicios es bueno. Los movimientos antifuncionales conducen a medio o largo plazo al médico de cabecera o al abandono del deporte.” (Dr. Ronald Burger, La técnica del Nordic Walking en la ciencia). Por tanto, considero que el Nordic Walking se caracteriza por una ampliación del caminar natural de la persona con la ayuda de dos bastones que nos permiten impulsar el movimiento hacia adelante, realizando movimientos funcionales de todo nuestro cuerpo.
Y esta es la riqueza precisamente del Nordic Walking, que, partiendo de esta base muy sencilla, puede adaptarse perfectamente a las distintas necesidades y objetivos de cada persona.
Y para clasificar de forma sencilla estas necesidades y objetivos, viene muy bien la descripción que hace Mariano Moreno en su libro Fittrek Sport (Caminar con bastones II, la modalidad deportiva):
– “Actividad física: Cualquier movimiento corporal que implique activación muscular, que implique un incremento de gasto calórico, etc. Asearse, subir las escaleras de casa, ir a la compra, levantarse del sofá, son ejemplos de actividad física.” En este sentido, hay personas que puede utilizar el Nordic Walking sencillamente para dejar su vida sedentaria y moverse de una manera diferente, aprovechando los beneficios de la marcha nórdica.
- – “Ejercicio físico: es la actividad física encaminada a la mejora de la salud o cualidades físicas. Y debe reunir una serie de características: o Planificado
- o Regular
- o De duración y/o intensidad suficiente
- o Resultados medibles”
Esto supone un paso más, poniéndonos unos objetivos más concretos que queremos conseguir con la marcha nórdica: mejora del bienestar físico y/o psíquico, ayuda o terapia para distintos tipos de enfermedades, perder peso, mejorar la coordinación, mejorar la postura corporal, mejorar la flexibilidad, etc.
– “Deporte: La práctica del ejercicio físico institucionalizado, de forma individual o grupal, tanto de ocio como de competición, sujeta a una serie de normas o reglamentos.” Pero como bien indica Mariano, el deporte no es un fin en sí mismo, sino un medio para lograr el bienestar social y la mejora de la calidad de vida. Recomiendo la lectura del libro para ver también otros puntos de vista relacionados con la modalidad deportiva de la marcha nórdica.
Por lo tanto y para concluir, creo que no hay un Nordic bueno y otro malo, o un Nordic correcto y otro incorrecto. Lo que sí es importante es practicarlo con una técnica bien aprendida, que nos ayude a realizar movimientos funcionales para evitar lesiones tanto en el ámbito deportivo como no deportivo. Y haciéndolo de esta manera, cada uno podrá aplicarlo en los distintos ámbitos posibles, todos ellos válidos y respetables.